Categorías: Cirugía vascular

Las arterias, como sabéis, son los conductos encargados de transportar la sangre buena, con oxígeno y nutrientes, desde el corazón a todas las células del organismo. Y las venas son las encargadas de devolver la sangre que ya no necesitan las células para llevarla de retorno al pulmón y al corazón.

Las arterias pueden estrecharse o incluso llegar a obstruirse debido al depósito de colesterol y triglicéridos, a la acción del tabaco, la hipertensión o la diabetes. Esta enfermedad se conoce como arterioesclerosis y puede afectar a todas las arterias del organismo, produciendo falta de riego.

Cuando esta falta de riego, afecta a las arterias de las piernas, se produce dolor en las pantorrillas al caminar, lo que conocemos como claudicación intermitente o ‘La enfermedad del escaparate’.

Qué es la arterioesclerosis

Si la arterioesclerosis afecta a las arterias carótidas internas, que están en el cuello y se encargan de llevar la sangre al cerebro, puede dar lugar a un infarto cerebral, cuyas consecuencias son más serias.

Otras veces, la arterioesclerosis produce completamente lo contrario, una dilatación excesiva de la pared de las arterias, que se conoce con el nombre de aneurismas. Son frecuentes en la aorta abdominal en hombres, fumadores por encima de 60 años, y aunque no suelen dar síntomas, porque crecen lentamente con el paso de los años, pueden llegar a romperse, causando una elevada mortalidad.

Es importante detectar a estos pacientes con riesgo vascular, porque en ellos las arterias del corazón también suelen estar afectadas y tienen un mayor riesgo de sufrir un infarto cerebral o de corazón.

Las personas que tienen riesgo vascular son aquellas que tienen antecedentes familiares de alguna enfermedad vascular: aneurisma de aorta, amputación de extremidades, un infarto cerebral…o todas aquellas personas, hombres y mujeres mayores de 60 años, con antecedentes de tabaquismo, sobrepeso, diabetes, estrés, hipertensión y colesterol o triglicéridos elevados, en todos ellos se recomienda hacer un Chequeo Vascular.

Con pruebas diagnósticas sencillas y no invasivas, como una simple ecografía, podemos ver si hay trombo en las arterias de las piernas o del cuello o si la aorta abdominal esta aneurismática.

El primer paso es hacer un diagnóstico precoz, controlar los factores de riesgo vascular y establecer un tratamiento para mejorar el pronóstico de la enfermedad y la calidad de vida de los pacientes con enfermedad arterial periférica.

Estos son los centros medicos disponibles para pedir cita online:

Para más información rellene el siguiente formulario:


    Seleccione un Hospital






    Comparte este Artículo, elige tu plataforma