Sinequia Ocular

¿Qué es la sinequia ocular?

La sinequia ocular es un problema que está directamente relacionado con el iris. Es muy importante porque esta parte del ojo tiene una función fundamental en lo que se refiere a la fisiología ocular. Es una membrana que se encuentra ubicada entre el cristalino y la córnea, y cuya función es controlar la cantidad de luz que es capaz de entrar en el ojo.

Para saber que es la sinequia ocular, debe aclararse que se trata de adhesiones que se crean entre las distintas estructuras que forman parte del ojo, dando como resultado una inflamación.

En cuanto a las sinequias iridianas, son las adhesiones del iris que se producen con alguna de las estructuras colindantes de la anatomía ocular, ya sea el cristalino o la córnea.

Síntomas de la sinequia ocular

En lo que se refiere a los síntomas de la sinequia ocular, se suelen poder apreciar a simple vista. Sin embargo, en la mayoría de los casos es necesario que se realice un examen ocular exhaustivo y profundo con la lámpara de hendidura para conseguir un diagnóstico fiable.

Causas de la sinequia ocular

Esta enfermedad no es igual en todos los casos y, aunque los efectos y los síntomas son bastante parecidos en la gran mayoría de los pacientes, las causas de la sinequia ocular son varias.

Traumatismo ocular

Los daños o golpes recibidos en la zona ocular pueden acabar derivando en la sinequia.

Lo más común es que quien la sufre presente dolor en los ojos y enrojecimiento. De todas formas, para que exista sinequia, tiene que existir una lesión tan fuerte como para que se pueda producir una alteración en el flujo del líquido acuoso contenido en los ojos.

Complicación de una cirugía ocular

Como es sabido, las cirugías tienen una serie de posibles complicaciones postquirúrgicas, pudiendo incluso no tener el efecto que se había esperado. Algunas pueden llegar a dejar algún tipo de secuela que, si no es tratada a tiempo, puede llegar a la sinequia ocular.

Efecto de la uveítis

En este caso se trata de la inflamación que puede aparecer en el interior de ojo, y que puede afectar a cualquiera de las partes de las que está formada la úvea: los coroides, el iris y el cuerpo ciliar.

Cataratas

Es una enfermedad común en edades avanzadas y puede llegar a alterar la fluidez el líquido acuoso en las cámaras posterior y anterior del ojo. Para llegar a este punto, obviamente, ha de darse un grado de afectación elevado.

Tratamiento de la sinequia ocular

Existen dos tipos concretos de sinequia, la anterior y la posterior. La sinequia anterior, conocida también como iridocorneal, es la adhesión entre la córnea y el iris. En cuanto a la posterior, que también se denomina iridocristalina, es una adhesión entre el iris y el cristalino. En el caso de que afecte a los 360 grados del iris, tiene el nombre de seclusión pupilar.

El tratamiento de la sinequia ocular que se puede adoptar varía en función del tipo de sinequia:

• Colirios ciclopléjicos y midriáticos. Con ellos se consigue romper y prevenir las adhesiones gracias a su efecto dilatador.
• Antifibrinolíticos. Su objetivo es conseguir romper las estructuras fibrosas que forman la malformación e intentar eliminarlas de forma total.
• Medicamentos antiinflamatorios.
• Medicamentos que reduzcan la presión intraocular durante el tiempo que se está tratando la sinequia.
• Iridotomía láser periférica. Esto se aplica en aquellos pacientes que tienen cierres angulares.
• Uno de los últimos recursos es el tratamiento quirúrgico.

La sinequia ocular puede producir distintos tipos de glaucomas, por lo que es importante acudir al médico ante la menor sospecha de sufrir este problema.