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¿En qué consiste un análisis Biomecánico de pisada?

El Estudio Biomecanico de la pisada permite analizar el modo en que camina una persona y averiguar si se produce alguna afección susceptible de ser corregida. Es una prueba que puede servir para prevenir lesiones como los esguinces, dolor de cualquier dedo de los pies, la aparición de espolones calcáneos, las fascitis plantares, la tendinitis o cualquier daño por sobrecarga las articulaciones.

Las alteraciones en la marcha o al caminar, que a simple vista no pueden detectarse se identifican con este tipo de evaluación, imprescindible para personas que practican deporte de manera habitual, debido al alto impacto en sus pies de manera constante. De hecho, el estudio biomecánico de la marcha se realiza en todo centro de alto rendimiento para deportistas. Sin embargo, también se lleva a cabo en pacientes que manifiestan dolor articular, con el objetivo de encontrar la manera de mejorar su calidad de vida, especialmente para las personas mayores. Los pacientes con diabetes también pueden ver mejorado su estado de salud gracias a estos estudios.

Paciente realizando un ejercicio para evaluar su pisada

¿Qué es y para que sirve el estudio biomecánico?

Lo cierto es que los pies están diseñados para realizar de forma completamente indolora la actividad física que requiera el soporte del peso del organismo humano, su movimiento y la carga adicional que pueda transportar. Con el estudio biomecánico se obtienen datos útiles para el diagnóstico y prevención en otras disciplinas de medicina y de fisioterapia.

Las principales partes que componen el Estudio Biomecanico de la pisada pueden establecerse de la siguiente forma:

  • Un análisis de los ejes mecánicos de la pierna, de la pelvis, de la espalda, todo ello con el objetivo de determinar desequilibrios y desajustes que puedan dar origen a lesiones o patologías derivadas.
  • Un examen de la pisada con los pies descalzos, con la intención de evaluar la actuación de los dedos y cómo trabaja la musculatura del pie en cada acción específica.
  • Exploración táctil de la espalda y de las piernas para tratar de analizar la postura general del cuerpo, e identificar cuáles son las tesiones concretas que se producen en los músculos.
  • Estudio del equilibrio en posición estática.
  • Realizar una descripción gráfica de las alteraciones que se detecten y perfilar los detalles del posible tratamiento a aplicar.

Es posible que, en algunos casos, se apliquen procedimientos de exploración complementarios, como las ecografías, con el objetivo de observar el estado de los tendones y el resto de los músculos relacionados. Con el estudio de la marcha en mano, e identificadas las desviaciones, se podrá diseñar un tratamiento que sirva para dar corrección a las alteraciones. Estas correcciones se realizan de manera progresiva, y se irán modificando en función de los resultados de las exploraciones iniciales y las que se realicen durante el seguimiento.

Una vez con toda la información disponible, el especialista médico podrá emitir un informe en que se detallará la necesidad o no de correcciones para evitar mayores problemas de salud. Sus recomendaciones pueden incluir un cierto grado de asistencia para la rehabilitación a incluir el uso para el paciente de plantillas de ortopedia personalizadas según la información de su estudio biomecánico.

Para los deportistas profesionales, la prueba biomecánica para la pisada está incluida en muchos seguros de salud.

¿Porqué realizarse un estudio de la pisada?

En casos de prevención: deportistas aficionados o profesionales se deben prestar a realizarse un estudio de la pisada con periodicidad anual, es decir, para cada temporada deportiva. El objetivo es evitar las lesiones por culpa de un mal apoyo del pie sobre el suelo.

  • Cuando se producen lesiones: si se ha producido una lesión en los miembros inferiores, como en la rodilla, el tobillo o incluso en la cadera, es recomendable someterse a un estudio biomecánico. Así podrá detectar el profesional médico si dicha lesión ha sido provocada por un mal apoyo de forma constante, que podría ser corregido con plantilla ortopodológica.
  • Tras un tratamiento ortopodológico: tras un tratamiento ortopodológico se debe realizar el estudio para comprobar si el tratamiento está siendo efectivo y cómo evoluciona la pisada del paciente.
  • Para la iniciación en el deporte: para realizar deportes como la carrera de fondo es muy importante realizar un estudio biomecánico de la pisada, para que el material que se necesita para hacer deporte se adecúe a la persona, por ejemplo, el calzado. Esto es una garantía a la hora de evitar lesiones, que perjudicarían la calidad de vida de la persona.
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