Bartolinitis: causas, síntomas y soluciones

La bartolinitis es una afección incómoda y, en muchos casos, dolorosa que afecta a un gran número de mujeres. Aunque no suele ser una condición grave, puede generar malestar físico y emocional, ya que afecta a una parte sensible del cuerpo y dificulta actividades cotidianas como caminar, sentarse o mantener relaciones sexuales.

Si te has encontrado con esta situación o sospechas que podrías estar sufriéndola, este artículo te ofrecerá la información necesaria para comprender sus causas, los síntomas y su tratamiento. Agradecemos especialmente la colaboración de la Dra. Lourdes Regalón, ginecóloga del Hospital Viamed Santa Ángela de la Cruz en Sevilla, cuya experiencia y conocimientos han sido fundamentales en la elaboración de este contenido.

¿Qué es la bartolinitis?

La bartolinitis se refiere a la inflamación de las glándulas de Bartolino, que se encuentran a ambos lados de la abertura vaginal. Estas pequeñas glándulas tienen la función de producir un líquido que ayuda a lubricar la zona vaginal. Cuando los conductos que permiten la salida de este líquido se obstruyen, el líquido queda retenido y puede formar un quiste en la glándula afectada. Aunque este quiste por sí solo no siempre es doloroso, en muchos casos se infecta, provocando una inflamación dolorosa conocida como bartolinitis.

Este problema es más común en mujeres en edad reproductiva y, si bien puede resolverse de forma sencilla en algunos casos, es importante prestar atención a los síntomas para evitar complicaciones.

¿Qué causa la bartolinitis?

Las causas varían, pero en general están relacionadas con la obstrucción del conducto que permite la salida del líquido de la glándula de Bartolino. Algunas de las causas más comunes son:

• Infecciones bacterianas: Ciertos tipos de bacterias, como Escherichia coli, responsables de muchas infecciones urinarias, pueden infectar el quiste de Bartolino. En algunos casos, bacterias relacionadas con infecciones de transmisión sexual (como la Neisseria gonorrhoeae o la Chlamydia trachomatis) también pueden estar implicadas.
• Obstrucción no infecciosa: A veces, el conducto de la glándula se bloquea por razones no relacionadas con una infección. Esto puede deberse a la acumulación de células muertas o fluidos que no se expulsan correctamente.
• Trauma o irritación: La fricción repetida en la zona vaginal, ya sea por la ropa ajustada o durante las relaciones sexuales, puede provocar una inflamación en las glándulas de Bartolino, incrementando el riesgo de obstrucción.

Síntomas comunes de la bartolinitis

Los síntomas varían dependiendo de si el quiste está infectado o no. Si tienes un quiste pequeño y no infectado, es posible que no presentes síntomas o solo sientas una pequeña molestia al caminar o sentarte. Sin embargo, si el quiste se infecta, los síntomas pueden incluir:

• Bulto en la zona vaginal: El signo más evidente es la aparición de un bulto palpable cerca de la entrada de la vagina, en uno de los lados. Este bulto puede variar en tamaño, desde pequeño y apenas perceptible hasta una inflamación considerable.
• Dolor e incomodidad: A medida que el quiste crece o se infecta, puede volverse doloroso, especialmente al caminar, sentarse o durante las relaciones sexuales.
• Enrojecimiento e hinchazón: Si hay infección, la piel alrededor del bulto puede volverse roja e hinchada, y sentirás calor en la zona afectada.
• Secreción de pus y fiebre: En los casos más graves, el quiste puede romperse y drenar pus, lo que indica una infección avanzada. También es posible desarrollar fiebre si la infección se extiende.

Opciones de tratamiento

Afortunadamente, tiene varias opciones de tratamiento, desde remedios caseros hasta procedimientos médicos, dependiendo de la gravedad de la afección.

Tratamientos caseros

Para los casos leves, puedes probar algunos cuidados en casa que podrían aliviar los síntomas y ayudar al quiste a drenar por sí solo:

• Baños de asiento con agua tibia: Sentarse en agua tibia durante 10-15 minutos, varias veces al día, puede ser útil para aliviar el dolor y ayudar a que el quiste drene. Este simple método es muy efectivo en los casos leves o en etapas tempranas de la afección.
• Analgésicos: Si sientes dolor o inflamación, medicamentos de venta libre como el ibuprofeno pueden ayudarte a reducir los síntomas mientras esperas que el quiste desaparezca.
• Higiene íntima adecuada: Mantén la zona limpia y seca. Evita el uso de productos agresivos o perfumados que puedan irritar aún más la piel y causar más molestias.

Tratamiento médico

Si el quiste no desaparece con el tratamiento en casa o si la infección es grave, es importante que consultes a un médico. Entre las opciones de tratamiento médico se encuentran:

• Drenaje del quiste: Si el quiste es grande o doloroso, el médico puede hacer una pequeña incisión para drenar el líquido. Este procedimiento alivia de inmediato la presión y el dolor. En algunos casos, se puede colocar un pequeño tubo para que el quiste siga drenando durante unos días.
• Antibióticos: Si se confirma que hay infección, el médico te recetará antibióticos para eliminar las bacterias responsables. Es importante seguir el tratamiento completo, incluso si los síntomas mejoran antes de terminar el medicamento.
• Marsupialización: En casos de recurrencia frecuente de bartolinitis, los médicos pueden recomendar una pequeña cirugía llamada marsupialización. Este procedimiento crea una abertura permanente para que el líquido de la glándula de Bartolino pueda drenarse, evitando futuros quistes.

Prevención

Aunque no siempre es posible prevenir la bartolinitis, existen algunas medidas que puedes tomar para reducir el riesgo de que esta afección ocurra o se repita:

• Buena higiene íntima: Mantener una buena higiene es clave para prevenir la acumulación de bacterias en la zona vaginal. Lava la zona con agua y jabón suave, evitando productos irritantes.
• Ropa cómoda y de algodón: Usar ropa interior de algodón y evitar ropa ajustada puede reducir la fricción en la zona y disminuir el riesgo de irritación que podría provocar un bloqueo de las glándulas.
• Relaciones sexuales seguras: El uso de preservativos puede reducir el riesgo de infecciones de transmisión sexual que podrían aumentar las probabilidades de desarrollar bartolinitis.

La bartolinitis puede ser una afección incómoda, pero con el tratamiento adecuado y un poco de paciencia, es posible aliviar los síntomas y prevenir complicaciones futuras. Si bien algunos casos pueden resolverse en casa con simples cuidados, es esencial que busques atención médica si experimentas dolor intenso o fiebre, ya que podrías necesitar un tratamiento más especializado.

En Viamed Salud, estamos a tu disposición para ofrecerte el apoyo y el tratamiento necesario para que recuperes tu bienestar lo antes posible. No dudes en pedir cita en cualquiera de nuestros centros.